"Que la música te acompañe"

¿Nunca os ha pasado la siguiente experiencia? Vais caminando por la calle con vuestros cascos, escuchando una canción que os sabéis de memoria,  es más, la habéis escuchado tantas veces que ya habéis perdido la cuenta, pero cada vez que el reproductor la selecciona, una fuerza interna nos hace subir el volumen casi involuntariamente. De repente vuestros labios, sin que ninguna orden haya sido mandada de forma premeditada, empiezan a balbucear la letra y vuestros pies quieren volar sobre una pista imaginaria a la vez que caminan sobre la acera. Vuestra mente se traslada a ese concierto y os imagináis que el intérprete sois vosotros, que incluso podéis ejecutar la misma coreografía. Camináis erráticos porque vuestro corazón no entiende porque no os podéis parar en medio de aquella calle e improvisar los pasos de baile que tanto ansiáis dar, pero el cerebro os conduce de forma irremediable a caminar hacia el destino fijado.

Por favor, espero no ser el único, sino me sentiría muy extraño. Pero creo que ese es el gran poder de la música. Consigue aflorar nuestros sentimientos como una conversación con un buen amigo, consigue que te emociones y a la vez puede alegrarte un día oscuro. ¿Pero es verdad que influye tanto en nuestra vida?

Según un estudio de la revista "Ciencia y Psicología" la música de nuestro Mp3 varía dependiendo de nuestra personalidad. Y es cierto que muchas veces la música que tienes refleja cualidades que exportas a la gente de tu alrededor. Pero no solo determina como eres, incluso tiene un factor medicinal. Médicos reputados recomiendan escuchar música relajante en caso de estrés agudo y ciertos estudios apuntan que los enfermos ingresados en hospitales, se recuperan mucho más rápido cuando escuchan música que les agrada.

 ¿Y qué podemos decir del aprendizaje?¿Ayuda?. Para muestra un botón, seguro que lo recordareis.

"El uno es un soldado haciendo la instrucción, el dos es un patito tomando el sol. El tres una serpiente que no cesa de reptar y el cuatro una silla que sirve para descansar..."

A todos nos han enseñado de niños lecciones cantando, e incluso de mayores a muchos les hubiera gustado aprenderse libros de texto igual que las canciones de su teléfono móvil, porque con una melodía todo es más fácil de aprender.

Incluso trabajando, en caso de no estar prohibida (porque puede ser un riesgo laboral) aumenta la productividad, la creatividad y el bienestar de los trabajadores. No solo eso, aumenta la memoria, mejora la coordinación motora y activa los centros de lenguaje del cerebro, ¿Se puede pedir más?.

Para todo aquel que canta a un rotulador, para todo aquel que se desgañita en el coche, para todo aquel que se inventa la letra sobre la marcha e incluso construye nuevos idiomas. La vida a veces nos da regalos, y la música es uno de ellos, solo espero que la próxima vez que escuchéis una canción y tengáis unas ganas irrefrenables de cantar en medio de un tranvía o de bailar en plena calle bajo la mirada de transeúntes ajenos a lo que transmiten tus cascos, os acordéis de que no sois los únicos.